La plantilla del Fútbol Club Barcelona está disfrutando de la Navidad junto a los suyos. Ronald Koeman concedió cuatro días de fiesta a sus jugadores para que pudieran desconectar de todo y recargar pilas de cara al regreso a la competición.
En estas ocasiones son muchos los jugadores que aprovechan para viajar y pasar las fiestas con sus familias. Uno de ellos es Leo Messi. El delantero azulgrana no perdió el tiempo y justo terminar el partido ante el Valladolid cogió un vuelo privado dirección Argentina. Junto a su mujer y sus hijos, Leo descansará en su país antes de volver a Barcelona para preparar el partido del próximo martes ante el Eibar.