Ya está aquí. Ya ha vuelto la Champions, la competición más prestigiosa del mundo que no siempre ganan los mejores equipos. O mejor dicho, NORMALMENTE, no ganan los mejores equipos. Lo suelen hacer aquellos que mejor compiten y menos errores cometen y éstos, por mucho que nos cabree a los culés, suelen ser los que van de blanco.
Los primeros partidos de octavos de esta Champions ya nos dejaron algunas sorpresas significativas como la derrota del PSG. Entraba dentro de las posibilidades pero siempre cuesta creer que un equipo que se ha gastado tanto dinero y que tiene tantas estrellas, tenga estos problemas en Europa.
De momento, aún están vivos, Messi sigue luchando por la quinta mientras que la sexta del Barça aún tendrá que seguir esperando. Y es una auténtico lástima porque tengo la sensación de que con el momento en que vive el equipo, habría sido capaz de superar los octavos de final e incluso volver a ser candidato al título. O al menos, volver a competir de tú a tú y sin complejos contra los tiburones de Europa sin salir pulverizados.