La joya de la corona está más cerca de reaparecer. Ansu Fati sigue ardiendo etapas en su recuperación y se espera que a mediados de abril ya vuelva a estar disponible para Xavi.
No negaré que su estado físico me preocupa y que una posible recaída me genera un pánico exagerado. Ya no sólo por la pérdida que le supondría al Barça sino también por lo que está pasando uno de los jugadores más prometedores del mundo. Las dudas son muchas, sobre todo después de la decisión que tomó de evitar el quirófano. El club hizo un gran esfuerzo y le dio un voto de confianza con su renovación pero la presión que esto comporta tampoco le ayuda en estos momentos.
Lo cierto sin embargo, es que Ansu Fati ya nos demostró de lo que es capaz y que si está al nivel que esperamos tiene el sitio asegurado. Es un futbolista único capaz de cualquier cosa. De ser un líder goleador en ataque que domine a Europa, de convertirse en un jugador de época que nos haga despreciar nombres como los de Haaland o Mbappé. Ansu es único.
Ojalá vuelva bien y paulatinamente recupere su mejor nivel aunque eso también signifique prescindir de hombres como Memphis, Adama, Auba e incluso Dembélé. Todos no tienen cabida y es que por poco que lo haga, Ansu Fati estará por delante de todos ellos.
