El Barça conseguía un empate insípido contra un muy buen Girona que este curso ya ha puntuado en San Mamés, en el Bernabéu y en el Camp Nou, entre otros. Ese empate de ayer es más mérito de los hombres de Míchel que demérito de los de Xavi.
El Barça no va a estar bien, el Girona va a estar mejor y al final el reparto de puntos fue lo justo. Los azulgranas no estuvieron hasta y, aún acusando a las numerosas bajas, volvieron a evidenciar problemas de ideas y de fluidez en su juego.
Sobre todo existe un problema de conexión entre el centro del campo y la delantera. Con los extremos concretamente. Raphinha, Ansu y Ferran están pasando por un momento de forma preocupante y están consiguiendo que cada semana echemos de menos a Dembélé. Ninguno de los tres se está ganando el crédito para seguir el próximo curso y el más jodido, es que con este nivel, el Barça no podrá hacer caja con ninguno.
En fin, seamos optimistas. El Barça es algo más líder y conseguirá un título de Liga que algunos ya se están encargando de desprestigiar. No les haga caso, no están del todo hasta… la Liga SIEMPRE la gana el mejor.