Partidazo mayúsculo el que nos espera hoy en un escenario inmejorable, Diego Armando Maradona. Con las ganas de volver a ver a un buen Barça que domine y someta a su rival pero con el miedo a que el resultado no sea el deseado.
Os diré que caer eliminados hoy no sería un fracaso. El fracaso ya fue quedar eliminados de la Champions y lo de hoy sería una decepción. Éste sería el peor de los casos pero espero que pasen cosas mucho mejores como por ejemplo, que Piqué y Araujo vuelvan a ser los kaiseros de la defensa, que el centro del campo vuelva a ser dominado de principio a fin por Busquets, De Jong, Nico y Gavi, que Pedri vuelva a hacer magia, que Ferran Torres, Adamba y Dembélé vuelvan a ser desequilibrantes, que Aubameyang y Luuk De Jong sean los killers que necesitamos y finalmente que, Ter Stegen, vuelva a ser santo.
Con una sonrisa en la cara pero tirando de ironía el alemán fue ayer el protagonista en la sala de prensa. Personalmente no lo vi cómodo y entiendo que esté fuera de sitio, desde el primer día ha sido siempre un hombre alabado por todos y este curso ha recibido las primeras críticas. Algunas merecidas pero otras sin fundamento. No es fácil ser portero del Barça y MATS ha demostrado con creces que es el hombre que necesitamos. No le quememos tan rápido que tiene crédito suficiente y volverá a ser lo que era.
Culés, hoy es un día grande y debemos estar preparados para lo que venga. Culés, ¡siamo pronto!