La selección española no hizo su mejor partido pero logró el mejor premio posible. Ganar cuando no te salen las cosas también es de equipo grande y quizás es lo que le faltaba a esta selección para acabar de madurar y hacerse mayor.
Lucho revolucionó el once el día que menos esperábamos y la jugada volvió a salirle bien. Después de unos días muy complicados donde se les ha maltratado injustamente, el equipo merecía una alegría como esta. Es la historia de siempre, la prensa saca las garras, Luis Enrique muerde y Luis Enrique acaba ganando. El kharma es eso… y no sé si España ganará el Mundial o no pero al menos le competirá y tendrá el carácter de un seleccionador que va de cara y que no se esconde de nada. A quien le guste bien ya quien no, también.
La cara que se le quedó a Cristiano contrasta con la de un exultante Luis Enrique. El momento no tiene precio. La careta del portugués además, es la que se le quedó a muchos hateros y detractores del seleccionador español que solo buscan disculpas para desestabilizarlo. Ánimos y que el día sea leve…
