Los culés podemos estar tranquilos hasta cierto punto, parece imposible que el Barça baje a segunda aunque quizás, en el peor de los casos, la UEFA podría dejarnos una temporada sin Champions. Visto así el daño sería menor. De momento, pero todo son hipótesis y más de uno está pasando por alto la falta de pruebas determinantes.
Esto no quiere decir que no estén, eso no quiere decir que el Barça no esté exento de culpa o responsabilidades. Esto no quiere decir que el nombre del club vuelva a quedar ensuciado por la negligencia y la mala praxis de quienes mandan.
Todo ello, todas las acusaciones son muy graves y la preocupación de los azulgranas sigue creciendo a medida que pasan los días y van saliendo nuevas informaciones. Han pasado demasiados días y aún no ha salido a hablar el presidente. Tenemos la necesidad de escuchar a Joan Laporta afrontando todo tipo de preguntas y respondiendo a todo sin ningún tipo de embudos. Con la verdad por delante y… poniendo luz en la oscuridad.