La secretaría técnica blaugrana hacía efectivo el pago de 3,5 millones de euros al Sao Paulo, al que ya le había abonado 1 millón más anteriormente en concepto de opción de compra para hacerse con el 70% del joven futbolista de sólo 19 años, mientras que el 30% restante seguirá en propiedad de los brasileños, según informaba ‘ESPN’.
El nuevo delantero blaugrana llegó al Sao Paulo con 14 años, y tras cinco temporadas con una trayectoria ascendiente había despertado el interés de equipos europeos por su olfato goleador, pues en 2018 consiguió 30 goles en 36 partidos.