Verónica Brunati, periodista argentina y viuda de nuestro compañero Topo López, y además una de las personas que mejor conoce a Leo Messi y su entorno, escribió hace unos días un interesantísimo artículo sobre los quebraderos de cabeza y lamentos que tenía el astro argentino cada vez que iba a recoger a su hijo Thiago de la guardería.
Resulta que el niño se encuentra tan a gusto en el recinto escolar que no quiere marcharse ni a la de tres y el pobre Leo sufre lo indecible para llevárselo a casa porque Thiago no para de llorar y quejarse durante el trayecto hasta casa.
Parece ser que Leo, o al menos así lo reflejan las imágenes que ha conseguido en exclusiva nuestro diario, se ha buscado un aliado para ir a recoger a Thiago. Y ese amigo ‘incondicional’ no es otro que Luis Suárez, cuyos retoños comparten guardería con el hijo de Leo Messi.
Está claro que aunar fuerzas siempre convierten más fácil el reto y así lo habrá pensando el bueno de Messi quien acudió a su cita con la guardería, al filo de la una del mediodía, acompañado del charrúa.
Y parece que el resultado fue óptimo porque los testigos que presenciaron la escena nos aseguran que Thiago estuvo en todo momento muy alegre y complacido con la visita de su padre.
Otro problema solucionado por Leo, que encara la recta final del curso de forma óptima tras anunciar su segunda paternidad.
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Fuente: www.sport.es
