Según ‘El Confidencial’, ACS reconoce, en su documentación remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que en el 2014 la Agencia Estatal de la Administración Tributaria inició una inspección que afecta al impuesto de Sociedades de 2009 a 2012, al IVA de 2011 a 2012, y a retenciones de impuestos sobre la renta de 2010 a 2012.
La comprobación de la Agencia Tributaria afecta a ACS y a algunas de sus filiales. Algo que se explica, según fuentes próximas a Hacienda, por el entramado de sociedades que la constructora creó para comprar su participación en Iberdrola.
‘El Confidencial’ recuerda que ACS llegó a tener el 20% de dicha compañía eléctrica, y constituyó diversas filiales con el objetivo de ser sociedades instrumentales tenedoras de las acciones y responsables de la deuda asociada. Entre ellas Mayor Assets, Corporate Funding, Roperfeli y Villa Aura, que llegaron a sumar una deuda de unos 2.200 millones de euros. Estas empresas fueron luego absorbidas y liquidadas en 2013 por Residencial Montecarmelo, la única de ellas que aún existe. ACS no había sido inspeccionada por Hacienda en los tres últimos años, y la Agencia Tributaria desea comprobar la liquidación de sus impuestos.
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Fuente: www.sport.es
