Fuimos los primeros en dar el aviso y sintiéndolo mucho hoy tampoco llevamos buenas noticias para Ansu Fati. La lesión lo aleja de todo: Eurocopa, Juegos Olímpicos y obviamente la temporada. Ahora marcha a hacerse una artroscopia en Oporto, ¿es que en Barcelona no se hacen? El problema es que Ansu ha perdido la confianza y su entorno la paciencia con cómo han ido las cosas. Y más allá de aquella información residual que van dando en cuentagotas os adelanto que el pobre chico ya ha perdido la cuenta del número de operaciones que lleva. Y lo que más se apunta ahora a las causas de esta deriva: un error médico y humano de la primera operación que le habría provocado a posteriori una infección en la rodilla izquierda. Dejémonos de historias: Ansu Fati tiene 18 años, ni es un Vermaelen que ya venía tarado de serie ni arrastra complicaciones típicas de una edad más avanzada y de años a pleno rendimiento. No pasa nada, se admite y se sale adelante. Pero tenemos que empezar a plantear el escenario más difícil y cruel que puede tener un chico al que hace cuatro días el idolatrábamos, Messi incluido, como un posible sucesor del mejor jugador del mundo. Y a lo lejos de todo, un buen día nos tendrán que explicar qué tiene que ver esta lesión con la marcha de talento médico azulgrana y la ruina que llevó Bartomeu a hacer de unos servicios de referencia mundiales a nivel de clubes los más paupérrimos y tocados por intereses que nunca hayan recordado.
Informe Casas: «Ansu ha perdido la confianza y su entorno la paciencia con cómo han ido las cosas»
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