La polémica nació por unas declaraciones del pasado mayo del antiguo responsable del fútbol base Antonio Morales, en las que, de forma velada, invitaba a Sánchez Llibre a demostrar si había cobrado o no plusvalías, beneficiándose así personalmente del traspaso de algunos futbolistas.
Además, el candidato a las elecciones del próximo día 19 y exvicepresidente económico del Espanyol Sergio Oliveró calificó de «inmoralidad» la actitud de Sánchez Llibre con relación a este asunto.
«En los años que he estado aquí, el club nunca me ha pagado ni un viaje ni una comida, fue un consejo de mi padre. He sido lo más honrado posible», afirmó.
Llibre ha confesado hoy que no quería hacer hoy una rueda de prensa, pero ha argumentado: «hace un año que se está atacando mi apellido y llega un momento en el que es insoportable, no puedo permitir que el trabajo que he hecho en 18 años se tire por los suelos en meses».
«Siempre he dicho que todo el dinero que ganara se reinvertiría en el Espanyol», ha dicho el exdirigente, quien cree que todo lo que se hablado estas últimas semanas «parece una campaña contra Dani».
Sánchez Llibre ha realizado una extensa exposición con cifras de las compras y ventas de Zabaleta, Pandiani, Pareja y Osvaldo. «El beneficio neto que le quedó al club de las operaciones fue de unos 10 ó 11 millones de euros sin invertir nada. Ya me gustaría a mí hacer negocios así», ha sentenciado.
Fuente: sport.es
